La cirugia de recorte alar hace parte de la cirugia de rinoplastia convencional, pero ha ido en crecimiento y cada vez los pacientes la solicitan más como un procedimiento individual. Se trata de un recorte de la base de la nariz, en el cual se reseca una parte del tejido para disminuir el diametro de las fosas nasales.
Se puede realizar mediante anestesia local(más común) o anestesia general; tiene un impacto inmediato en la apariencia de la nariz y en la forma de la cara, dando una apariencia de rostro más alargado y delgado.
Se realiza más en pacientes de raza negra, que tienen una nariz más ancha naturalmente, pero también se puede realizar en cualquier persona.
Este es uno de sus mayores atractivos, al ser un procedimiento poco invasivo, el paciente puede volver a su trabajo a los 3 dias si así lo requiere.
Si, pero las cicatrices quedan escondidas en el surco entre la mejilla y la nariz, de modo que no son muy visibles.
También se le explica a los pacientes, que como en otras partes del cuerpo, las fosas nasales no son simétricas, por lo que en determinados casos puede ser necesario realizar un recorte de ala nasal mayor en un lado, ésto con el objetivo de tratar de mejorar la simetria de las fosas nasales.
El recorte de alas nasales se realiza en quirófano, porque las alas nasales tienen por debajo una arteria que causa sangrado, el cual requiere manejo con dispositivos quirúrgicos para evitar complicaciones como: hematomas, hemorragias, que se abra la sutura quirúrgica, entre otros.
En general, no sonarse la nariz sino limpiarla con solucion salina en spray nasal, limpiar la nariz con suavidad, dormir boca arriba. Todo ésto por una semana.
Si quieres realizarte una cirugia plástica pequeña, pero con impacto grande, anímate y agenda tu cita de valoración.